GENEALOGÍA Y SIGNIFICADOS DEL ATEÍSMO

El ateísmo equivale a una noción amplia para designar una posición intelectual, al mismo tiempo una situación existencial y una opción de conciencia, que niega la existencia de un Dios o de los Dioses. Por tanto, ser ateo (a-theos) significa “ser sin Dios”. Expresa una negación que está entrelazada con otras dos: niega cualquier forma de trascendencia y, precisamente por ello, niega también las formas más grandiosas del dualismo. Teniendo en cuenta la fuerte tradición teísta Occidental, en su sentido más fuerte, el ateísmo debe entenderse como expresión de una resuelta libertad intelectual y autonomía personal. Así un ateo es quien opta por afrontar las exigencias de la vida a partir de sus propios recursos de pensamiento. Históricamente las palabras ateo y ateísmo han evolucionado en el marco de las religiones monoteístas, y por esta razón se han utilizado de preferencia con un marcado perfil infamante. Si bien ingresaron tardíamente en las lenguas europeas modernas, y sólo comenzaron a utilizarse en forma cotidiana hacia el siglo XVIII, la palabra ateo de origen griego es muy antigua. En un momento preciso el concepto adquiere carta de ciudadanía intelectual con la Enciclopedia Francesa publicada en 1751, que incorpora dos extensas entradas específicas: ateo y ateísmo. Convertida de este modo en un campo temático, Voltaire la incluye en su Diccionario filosófico de 1764; y finalizando el siglo cuando Sylvain Marechal publica su Diccionario de ateos, ya se hace inocultable. En síntesis, antecedentes más, antecedentes menos, desde el XIX se ha desarrollado una activa reflexión en esta materia expresada en múltiples publicaciones, y poniendo a la vista autores de buena formación intelectual. Una reflexión mayormente ilustrada y con un fuerte sentido ético, desplegada especialmente (pero no exclusivamente) en dos dimensiones: como ejercicio de la sospecha y como construcción de una espiritualidad laica. Otro aspecto sustantivo de esta problemática, sin rasgos de paradoja, corresponde a las notables convergencias verificadas en distintos intercambios intelectuales entre descreídos y creyentes. En todos estos encuentros, sin excepción, los elementos de coincidencia y acuerdo fueron mayores que las diferencias insalvables, al tiempo que surgieron sin afectación diferentes concesiones en el plano de las ideas. Cuestión que parece indicar que el asunto fundamental se resuelve en la aceptación de las diferencias, la valoración de la diversidad, la crítica sin maquillaje, la correspondiente autocrítica, y, por cierto, la convivencia.
País: 
Chile
Temas y ejes de trabajo: 
Semióticas de los discursos doxológicos (político, religioso, periodístico)
Institución: 
Universidad de Chile
Mail: 
rlopezp@med.uchile.cl

Estado del abstract

Estado del abstract: 
Accepted
Desarrollado por gcoop.